Destete tras una lactancia "prolongada"

Ayer fui por primera vez a un teatro de títeres con la pequeñaja. No tenía muy por seguro que se estuviera quieta, pero para mi sorpresa tuvo momentos de embobamiento profundo. Le sorprendió muchísimo que esos muñequitos extraños hablasen, aplaudiesen y se moviesen así, de esa manera tan exagerada.
Incluso, en ocasiones, me señalaba al escenario con cara de "mira mamamadremiadelamorhermoso".
Lo de ayer fue una de las actividades que organiza cada domingo una agrupación de padres y vecinos de Aluche. Fenomenal para los peques (porque hay otras actividades como cuentacuentos, biblioteca, sala lúdica,teatro...) y genial también para los padres, que ven cómo los enanos se emocionan, ríen y aplauden con algo diferente a la televisión.
Duró algo más de media hora y el cuento versó sobre una niña que no quería salir de una caja por miedo a que se rieran de ella. Le contaron el cuento de un rey que estaba acomplejado porque tenía orejas de asno...Ante el riesgo de que descubran su defectillo, contratan a un peluquero de confianza en la corte, que ha de guardar el secreto, a riesgo de ser decapitado.
Al final, una flauta fabricada con la rama de un árbol que creció en el lugar en el que se enterró el secreto del rey, fue la culpable de que las palabras y los sonidos que brotaban, acabara desvelándolo todo.
La moraleja: orejas grandes, orejas pequeñas, nariz gorda o fina...todo el mundo siempre va a serdiferente, por lo que los complejos no sirven para nada.
El próximo domingo...volveremos a ver qué hay.
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