En todas las casas si hay algo que se gasta con bastante asiduidad es el papel higiénico y los cartoncitos sobre los que se enrolla el papel son unos materiales buenísimos para hacer manualidades con niños. Es una manera de estar entretenidos con ellos y, a la vez, dar rienda suelta a la creatividad.
De hecho, con las manualidades, la pintura y las actividades creativas he encontrado el modo de mantener a la pequeñaja entretenida durante algo más de 10 minutos.
Hoy os quiero mostrar lo que hemos hecho estos días con un montón de cartones del papel higiénico que hemos ido almacenando en las últimas semanas: un castillo que además de sencillo de hacer queda muy bonito como adorno en cualquier habitación infantil.
Materiales que vamos a necesitar:
- Tijeras
- Rollos de cartón del papel higiénico, papel de cocina o similares
- Trozos de cartón que podamos aprovechar
- Cola
- Un rotulador negro
- Pinturas al agua, témperas o acuarelas (nosotras utilizamos pinturas al agua infantiles)
- Hojas de colores, con las que haremos los conos que serán los tejados de las torres
Paso 1: entrada al castillo
Necesitaremos tres rollos: dos de ellos serán las torres de entrada al castillo y con el tercero, usando cada una de sus dos mitades, haremos las almenas.
Una vez listo y con otros dos trocitos rectangulares de cartón, haremos las paredes frontal y trasera, de modo que pegando todas las partes nos quede así:
Yo le he puesto un pequeño cartel con su nombre escrito con letras medievales, para personalizarlo.
Paso 2: Torre del homenaje y torres aledañas:
Este paso quizá sea el más sencillo de todos, pues sólo necesitamos los rollos y el papel de colores. De hecho, podemos utilizar también el cartón de los rollos del papel de cocina, que son más largos y pueden servir para jugar con las alturas de las de torres de nuestro castillo.
Con el papel de colores, haremos los conos con los que montaremos los tejados de las torres. (Os dejo a continuación un pequeño esquema para hacerlos, aunque las medidas son orientativas y siempre podéis adaptarlas a lo altos que queréis que os queden los tejados)).
El resultado de las torres, previa aplicación de la pintura, es éste:
Parte 3: Decoración de todas las piezas
Una vez tenemos todas las partes montadas, llega el momento de pintarlas. Podéis emplear témperas, acuarelas, rotuladores o pinturas al agua que es lo que utilizamos nosotras.
Este paso es más divertido cuanto más de pringas, cuanto más de manchas y cuanto más dejas participar a los peques.
Nuestro castillo, decorado y pintado, con puertas y demás, es éste:
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