Destete tras una lactancia "prolongada"

Imagen
¿Qué es una lactancia prolongada? Prolongar significa alargar... y partiendo de esa base, la nuestra está siendo una lactancia prolongada, que hemos alargado más allá de los 24 meses, los dos años, los terribles dos años. Y es que somos muy obedientes y nos tomamos muy en serio las recomendaciones tanto de la AEPED (Asociación Española de Pediatría) y de la OMS (Organización Mundial de la Salud). Esta primera, afirma que, si bien "prolongar significa hacer que algo dure más tiempo de lo normal o establecido, el empleo de este término puede hacer pensar que la lactancia en niños mayores de un año se considera como algo que está 'más allá de las recomendaciones', cuando en realidad es un objetivo en salud materno-infantil. En España y en mi círculo más próximo, dar el pecho más allá de los seis primeros meses ya es toda una proeza. No conozco muchas mamás que hayan decidido hacerlo. Las más, quizá llegan a los seis o incluso a los siete, pero hacerlo hasta los nueve

El tercer cumpleaños y la threenager en que se ha convertido

Parece que hemos pasado los terribles dos años y nos hemos acercado prematuramente a la adolescencia, al pavo, a la revolución hormonal y a los llantos de mentirijilla constante.

Celebramos el tercer cumpleaños en el parque, colgando entre los árboles un montón de globos y guirnaldas y llenando las mesas de nubes de algodón y patatas fritas.

Invitamos a mis primos y a los hijos de mis primos...Y se lo pasaron genial: correteando por el parque, subiéndose a las piedras, abriendo y cerrando los grifos de las fuentes... Fue algo agotador pero divertido.

Y ahora que ya hemos cumplido tres... se ha convertido en una auténtica threenager, adelantándose el pavo de una manera pasmosa. Llora por todo, pero de mentirijilla para lograr conseguir lo que quiere..., todo le va mal, todo le parece mal y protesta por (casi) todo. Me reta. Me reta continuamente...

Pero creo que he conseguido salvar la situación y me he convertido en una negociadora de aúpa... recurriendo de vez en cuando incluso al soborno: yo te doy si tú me das...Más allá de la técnica de premios, recompensas y castigos.

Podríamos decir incluso que lo nuestro es como de andar por casa, adaptado a las necesidades que vamos encontrando..., pero resulta.

Y al final lo que está claro es que si funciona, por qué cambiar?

Comentarios

Entradas populares de este blog

Onicomadesis...otro 'efecto secundario del virus boca-mano-pie'

Destete tras una lactancia "prolongada"

Sobreviviendo a los cólicos del lactante: II parte